New kids on the block
26/7/21Dos de los momentos más importantes de esta fase melómana en la que llevo varias décadas (y para la que parece ya no hay vuelta atrás) han sido , por un lado, cuando descubrí que la música iba a ser una de mis grandes pasiones y, por otro, cuando llegaron los grupos que prendieron ese fuego emocional del que no puedes (ni quieres) escapar. A partir de ahí, supongo que cada aficionado sigue su propio camino: algunos se aferran a esas bandas y sonidos iniciáticos (como si fuera el barco de Chanquete) y otros, sin renunciar al pasado, nos sumergimos en una búsqueda continua en lo novedoso, quizás tratando ingenuamente de volver a revivir esas sensaciones primerizas. En mi caso soy plenamente consciente que probablemente nunca vuelvan, pero eso no menoscaba mi inquietud por seguir descubriendo.
Esta idea de seguir conectado a la actualidad musical se comentaba en los textos de Jau y Curri Bauluz (aprovecho para agradecer su colaboración así como las del resto de la gente que se ha animado) para introducir sus respectivas listas: “El nuevo pop” y “Ave Fénix”. Posiblemente nada te sorprenda y casi todo te recuerde a algo anterior, pero también pueden aparecer canciones que te vuelvan a hacer cerrar los ojos, cantar en la ducha (o en el trabajo) o mover la cabeza como antaño (aunque el cabello ya no siga el ritmo). De hecho, me parece una buena filosofía vital. Como decían Chucho en “”Magic”: lo mejor de nuestras vidas aún está por ocurrir.
Dicho esto, yo apenas he evolucionado en lo que se refiere a los sonidos que pasan por mis oídos (por mucho que algún día quiera ir de ecléctico y meta a Nina Simone o a Morricone en mis recopilatorios). Mis gustos siguen en esas suerte de universo sonoro que englobaría (como jocosamente suelo etiquetar) al “techno-gay” (no disrespect), a las melodías melancólicas de los “Barbudos llorones” (no disrespect ni para los barbudos ni para los llorones either), al pop ensoñador o pluscuamperfecto (sí, he leído demasiada prensa musical) y a las murallas (guitarreras) de sonido (para sobrevivir a tu maremágnum vital). Toda este ladrillo sirve de preámbulo para esta lista de grupos surgidos en los últimos años. Huelga decir no iban a salirse mucho de las coordenadas anteriormente citadas, pero siguen siendo canciones que me mantienen tan ilusionado por la música como cuando era un advenedizo. No cuesta nada darles una oportunidad. Como dice Courtney Barnett en una de las canciones: you need a little time on your own. x Sergio Morán
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