Bacalao!

12/12/22

En los ochenta en Valencia, un movimiento contracultural, vanguardista y muy hedonista, creó de una forma espontánea una escena en torno a la cultura de Club, la figura del Dj y una exquisita selección musical, que tuvo unos años de esplendor siendo un referente internacional. 


En su última etapa se le denominó “ruta del bakalao” y debido a la avaricia y picaresca de los implicados, la masificación y vulgarización del público y la pérdida de identidad se cargaron la escena, convirtiéndose en algo cutre y denostado por los medios y la sociedad.


En los inicios, mediados los 80s, en los Clubs de la ruta no había máquina y si había pop moderno, rock de guitarras, conciertos en directo, desde Depeche Mode a Stone Roses, Prototecno alemán, performances, desfiles de moda, teatro y horarios muy locos que permitían empalmar el cierre de una disco con la apertura de otra.


No había bakalas, ni pijos, ni garulos.. estos vinieron después; si había New Romantics, siniestros, punk, jóvenes que no encajaban con la sociedad existente y no gustaban de las sesiones de discoteca con funky, rumba ni lentas para “pillar” que era lo que se llevaba; buscaron espacios donde expresarse libremente y experimentar, utilizando el baile y la música como elemento de  identidad y la discoteca como templo.

 

Mariano Starkych cuando abrazaba el nuevo romanticismo


Ir a Valencia molaba. La gente de la movida madrileña: Almodóvar, Radio Futura, actores, diseñadores…si querían estar a la última se perdían por allí.


Los Dj viajaban a Londres y traían novedades todas las semanas; algunas alcanzaban el éxito primero en Valencia y luego en el resto de Europa. La cultura del Club, no sería como la conocemos si no hubiera sido por la ruta del bacalao.


De todo eso va la playlist y aunque parezca increíble, esta música llegó a la Ribera del Ebro y a mi juventud a través de los casetes grabados por algún Pinsequero que venía a Valencia (música pinsequera le llamábamos) y nos descubrió a Sisters of Mercy, The Lord of the New Church y la palabra mescalina.


De alguna sesión de la KWM grabada de alguna copia de otra copia que rondaban por el instituto, con los Grauzone o los B-Movie y de la música del Pub El Grifo, primer lugar que escuché a Residents y Front242 o de la sala En bruto donde pinchaban maxis de The Cult y The Cramps.


Abro la lista con el Don’t you de Simple Minds, que durante algún tiempo nos volvió locos a los aprendices de DJ, ya que la canción no salía en el Lp y si en la BSO de la peli The breakfast club, y cuando preguntabas en la cabina donde la pinchaban (ese era el Shazham) no te lo decían.


Hago una mención especial al temazo A Forest que siempre me ha hipnotizado y todavía llevo en mi maleta de vinilovers y el Dulces Horas de cuando todos quisimos ser Robert Smthiths, Carlos Goñi incluido.


Y para hipnotizar ruego ver este vídeo de la canción de Trisomie21 que me recuerda a una de las pocas veces que estuve en el KWM. Aunque seguro que no era así, son mis recuerdos y los distorsiono como quiero 😂😂 


Como soy un gusiluz y creo que hasta el infierno mola por que se pueden asar castañas y estarán mis amigos, he dejado algún tema de la etapa bakala como Interfront y With it guys. 


Recomiendo lean el libro ¡Bacalao! de Luis Costa, que da una amplia visión social y musical de lo que dieron más de 10 años de ruta y de donde fui recopilando esta lista a la vez que me sumergí en su lectura.


Mariano from starkytch, para escribir esto solo ha consumido horchata, fartons y un paseo por la Malvarrosa.



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